Diciembre 17 del 2014

Renovación 352

¿Hemos dejado atrás la negación?

La negación es un mecanismo de defensa de nuestra mente, que nos protege mientras hacemos acopio de la energía necesaria para enfrentar una realidad que puede ser traumática y dolorosa.

Así que es natural que recurramos a él cuando la pérdida es muy importante, y no lo es cuando optamos por negar la realidad que estamos viviendo por miedo a salir de una zona de confort enfermiza.

Así, cuando muere un ser querido, pensamos que estamos viviendo una pesadilla y que pronto vamos a despertar para que todo vuelva a ser como antes. Es válido por un tiempo mientras manejamos nuestra tristeza y el miedo que se ha apoderado de nosotros. Después de manejar nuestras emociones en forma asertiva, probablemente con apoyo profesional para que el proceso de duelo sea más llevadero, estaremos listos para asumir la realidad: nuestro ser querido está muerto y no va a regresar nunca.

Negar la realidad de nuestra codependencia y la raíz de ella, es una negación que sólo hace perdurar las relaciones enfermizas.

Si yo hago a mis hijos co-dependientes porque “ellos son lo más importante en mi vida”, les estoy privando de la posibilidad de realizarse a plenitud, de ser independientes, autónomos y dueños de su destino. Les estoy hipotecando mi vida para “que ellos hagan todo por mi durante mi vejez”.

Una cosa es tener un Proyecto de vida y vivirlo, conscientes de que la Meta Final es nuestra muerte, y otra el que “nos sacrifiquemos por los demás, mientras vivimos una vida sin sentido. Podremos requerir apoyo y ayuda de todo tipo cuando seamos viejos, sin que ello signifique que vamos a ser dependientes emocional, mental y espiritualmente de nadie.

Se cosecha lo que se siembra. Si hemos sido generosos y hemos dado a raudales respeto, amor y la oportunidad de crecer y madurar, vamos a recibir lo mismo cuando seamos vulnerables por la edad.

La forma óptima de favorecer la formación integral de los hijos es con el ejemplo. Si yo me amo, podré amar. Si yo me respeto, podré respetar. Si vivo una vida con sentido porque cumplo con mi Misión y ello me hace feliz, los demás querrán hacer lo mismo.

Nadie puede dar lo que no tiene.

Vamos a evitar caer o permanecer en la negación para evitar avanzar y crecer.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s