Renovación 331
Podemos limpiar el pasado o avanzar hacia el futuro.
En alguna ocasión escuché una anécdota que me impactó mucho. Era otoño y un señor que estacionaba su auto en la calle, bajo un frondoso árbol, veía todas las mañanas cómo éste amanecía cubierto de hojas. Las quitaba y se iba a toda prisa porque ya había perdido un tiempo muy valioso que requería para desplazarse hacía su trabajo.
Un vecino le preguntó por qué hacía eso, a lo que contestó que no quería cargar basura, y le preguntó qué hacía él con toda la hojarasca que amanecía sobre su auto. La respuesta fue: “En lugar de perder el tiempo recogiendo las hojas, me muevo y conforme avanza el coche, las hojas van cayendo impulsadas por el viento”
Extrapolé eso a mi vida y pensé cuánto tiempo había estado quitando hoja por hoja de la basura que había caído en ella, en lugar de caminar, de avanzar con paso firme hacia mis metas, y permitir que el viento se lleve la basura conforme yo me dirijo hacia mi objetivo.