Julio 23 del 2014

Renovación 2015

Cuando caemos en la tentación de hacer trampa a los demás, estamos cometiendo un fraude contra nosotros mismos.

¿Qué es lo más relevante…
• la aprobación o el reconocimiento de los que nos rodean?

• un número en un papel que pruebe que “se mucho” de alguna materia?

• avanzar a como dé lugar para ganar la delantera?

• sentir que soy mejor que los demás?

• confirmar el dicho mexicano de “el que no transa, no avanza”?

• evitar conocer nuestras lagunas cognitivas, emocionales, psicológicas, espirituales?

Vale la pena evaluar cómo nos desempeñamos ante las crisis y los retos. Saber ser asertivos, honestos, íntegros, es una característica de la Inteligencia Emocional.

Modelamos a los que nos rodean: nuestros familiares, alumnos, pacientes, pupilos, vecinos, colaboradores, una conducta.

Modelar la excelencia significa ser auténticos y respetarnos para poder respetar a todo lo que nos rodea.

En los momentos de crisis, cuando requerimos contar con una mente clara y abierta, equilibrio emocional, además de una espiritualidad elevada, es cuando sale a relucir lo que hemos trabajado en nuestra formación.

En esos momentos, en que la diferencia de un minuto en nuestras acciones y nuestra actitud van a ser determinantes, no hay manera de hacer trampa, somos lo que somos.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s