Renovación 192
Cuando practicamos la “visión del túnel” de la neurosis, es probable que tendamos a un sentirnos cansados y llegar a un agotamiento emocional.
Se trata de ver sólo, únicamente, una salida para la situación adversa que nos inquieta. Las cosas tienen que ir por determinado camino, en cierta sucesión de hechos y resultados y, si algo no sale como lo esperamos, nos desplomamos y no sabemos qué hacer.
Admitir que toda situación puede tener varias opciones para solucionarse, unas a corto o largo plazo, otras podrían requerir una mayor inversión en dedicación, esfuerzo o energía, es esencial para ampliar el horizonte de salida.
Escribir todas las posibles acciones para resolver la situación, valorar y ponderar los Pros y los Contras, ventajas y desventajas, consecuencias y costo-beneficio, nos permitirá planear la ruta a seguir.
Aceptar, con flexibilidad, que puede haber acontecimientos imprevistos que modifiquen nuestro camino o lo demoren, nos permitirá no exasperarnos y mantener la calma para seguir avanzando hacia nuestras metas.
Si nos vemos obligados a detenernos, podemos aprovechar para recuperar fuerzas, poner en orden nuestras ideas, y asimilar nuestras vivencias, disfrutar y gozar de unos momentos de paz y tranquilidad.