Renovación 128
Dudar de nuestra capacidad de ser y estar formó parte del pasado.
Hoy podemos ser auténticos con nosotros mismos y con los demás y sabemos “estar” en cada lugar, en cada momento, en cada circunstancia.
Si en ocasiones fallamos y nos engañamos y si pretendemos engañar a los demás, tarde o temprano saldrá a la luz el fraude, sobre todo si hay niños pequeños, ya que ellos tienen un radar muy sensible para el lenguaje corporal, para lo que no se dice y está presente, aunque intentemos ocultarlo.
Vamos a practicar la honestidad, la integridad, la autenticidad y nuestras vidas se verán enriquecidas con el amor y la alegría.