Renovación 56
Para podernos renovar es importante que identifiquemos, reconozcamos y aceptemos:
* lo que somos,
* en que parte del camino estamos,
* cuál es nuestra ubicación en el proceso de crecimiento y aprendizaje.
Vamos a hacerlo. Vamos a entrar dentro de nosotros mismos y a aceptar lo que encontremos. Ese o esa persona somos nosotros. Un ser humano con muchas cualidades y defectos, habilidades y destrezas, un enorme potencial ya desarrollado para lograr sus metas, un potencial, aún mayor, que espera ser desarrollado para facilitar que triunfemos en la vida. También tenemos una mente y un corazón en crisis, o que ya ha resuelto los obstáculos y adversidades que se le han presentado y ha aprendido la lección implícita en cada situación.
Quitemos los velos del miedo y la vergüenza para aceptarnos tal y como somos.
Puede ser que los demás tengan expectativas acerca de nosotros, de lo que debemos hacer y de cómo debemos comportarnos, pensar, sentir, actuar. Esas son sus expectativas y no es conveniente que rijan nuestras vidas. Las que cuentan son las nuestras.
Vamos a separar lo que quieren o esperan los demás de nosotros, de lo que nosotros queremos de todo corazón hacer en la vida.
Seamos honestos con nosotros mismos y precisemos con detenimiento lo que deseamos y esperamos en la vida. Revisemos si es viable el proyecto que nos lleve a lograrlo, y demos el primer paso en firme rumbo al éxito.