Rompiendo con una tradición añeja, el Papa Francisco respondió, durante 84 minutos, y sin intermediarios, a 20 preguntas directas que le hicieron los periodistas sobre los más espinosos temas.
Por lo general hay un protocolo tácito sobre lo que es válido o no preguntar y cuándo, y también es cierto que ha habido Papas más hábiles que cualquier torero para manejar la mano izquierda.
Voy a plantear las preguntas y sintetizar algunas respuestas. En el periódico El País podrán encontrar, en las páginas 2, 3 y 4 del 30 de julio pasado, la entrevista firmada por Pablo Ordaz. Les recuerdo que la dirección es: http://www.elpais.com. Estoy segura que la mayoría de los diarios y revistas de actualidad van a publicar el encuentro.
Una pregunta fue sobre el tipo de reforma que tiene en mente para la Curia vaticana y si contempla la posibilidad de suprimir el IOR, el llamado Banco del Vaticano, a lo que contestó, entre otras cosas, que está reformando lo que los cardenales dijeron que se tenía que reformar durante las congregaciones generales y que, las características del IOR, sea un banco, un fondo, o lo que sea, deben ser la transparencia y la honestidad.
Cuando le preguntaron por qué no habló en Brasil del aborto y del matrimonio entre personas del mismo sexo, contesto que la Iglesia se ha expresado ya perfectamente sobre eso, que no era necesario volver a eso, y que los jóvenes ya saben cuál es la postura de la Iglesia.
A la pregunta del por qué les había dicho a unos jóvenes argentinos que se sentía enjaulado, respondió que a él le gusta andar por las calles, que era un cura callejero y ha sentido muchas veces ganas de pasear por las calles de Roma.
Algunas frases relevantes que destaca el periodista son:
“Los pecados se perdonan, los delitos no”.
“Tener a Benedicto XVI en el Vaticano es como tener al abuelo en casa”.
“Si un gay busca al Señor y tiene buena voluntad, ¿quién soy yo para juzgarlo?
“Alguien que dice “no estoy de acuerdo” es un buen colaborador”.
“Si el Señor no se cansa de perdonar, nosotros no tenemos otra opción”.
“Es una locura poner un blindaje entre el obispo y la gente”.
“La ordenación de las mujeres es una puerta cerrada. Ya lo dijo Juan Pablo II”.
Con esto se darán cuenta que contestó todo tipo de preguntas, con una sencillez y claridad absoluta que se está volviendo un sello papal. Algo a lo que no estábamos acostumbrados. Puede parecernos o no su postura, lo que no podemos negar es que es un Papa diferente. Ojalá dure muchos años para que pueda implementar algunos de los muchos cambios que requiere la Iglesia católica.
Hola. Puesto que incluyes la etiqueta «gay» en tu entrada me permito recordar una frase de J. F. Kennedy:
«Perdona a tus enemigos, pero nunca olvides sus nombres» Yo no lo haré, aunque él parezca «diferente». Saludos, Luis
Gracias por escribir. Guardar en nuestro corazón sentimientos de animadversión o recelo, suele no traernos cosas positivas. Que Dios llene tu vida de amor y no tengas enemigos, sino un mundo lleno de personas diferentes, de distitos credos o formas de pensar, que vale la pena conocer para afirmar tus premisas. Saludos.